Buenos días hermanos y hermanas del mundo entero; Aquí les comparto con amor y fe, la bendición de consejos y dirección recibidos en este día maravilloso. Oro y pido oración por mi proceso judicial que estoy siguiendo, para que nuestro Señor JESÚS, obre en la mente y el corazón de todos los que me están juzgando y lo hagan con justicia, amor, paz y fe.
PROVERBIOS CAP: 30 y 31, VERS: 8 y 29.
VANIDAD Y PALABRA MENTIROSA APARTA DE MÍ; NO ME DES POBREZA NI RIQUEZAS; MANTÉNME DEL PAN NECESARIO.
Hermanos desechemos las cosas del mundo y aceptemos el propósito que DIOS, determino para nosotros. Viviendo de acuerdo a la voluntad de Él, aceptando y obedeciendo las cosas que ÉL nos da e indique todos los días de nuestra existencia, haciéndolo bajo la dirección del Espíritu Santo.
MUCHAS MUJERES HICIERON EL BIEN; MAS TÚ SOBREPASAS A TODAS.
Hermanos ayudemos a nuestra esposa a conocer, aceptar y vivir, bajo la dirección de nuestro Señor y Salvador JESÚS. Estudiando la palabra de nuestro DIOS, y poniéndola en práctica en su caminar diario. Dejándose guiar por el Espíritu Santo, viviendo sus propias experiencias con DIOS, como lo hacemos nosotros.
SALMOS CAP: 64, VERS: 8 y 9.
SUS PROPIAS LENGUAS LOS HARÁN CAER; SE ESPANTARÁN TODOS LOS QUE LOS VEAN. ENTONCES TEMERÁN TODOS LOS HOMBRES, Y ANUNCIARÁN LA OBRA DE DIOS, Y ENTENDERÁN SUS HECCHOS.
Hermanos los hombres impíos, son atormentados por sus propios hechos; Mostrando al mundo su vanidad, orgullo, maldad y mentiras. Dándonos a conocer a los hijos de DIOS, que Satanás el padre de la mentira, ciega a todos sus seguidores, para que no vean la luz de DIOS. Por eso nosotros los hijos de JEHOVÁ, y seguidores de JESÚS, somos la sal del mundo, los que debemos dar a conocer su palabra y la salvación de nuestro Señor y Salvador JESÚS. Entendiendo y desarrollando el propósito que DIOS, determino para cada uno de nosotros.
Hermanos y hermanas nuestra lucha no es contra carne ni sangre, sino contra potestades de las tinieblas: Satanás y sus ángeles; Espíritus que no vemos pero que están al rededor de cada uno de nosotros como león rugiente, prestos a devorarnos si nosotros dejamos de practicar la palabra viva y eficaz; Y nos alejamos de la compañía de nuestro Señor JESÚS. Bendiciones para todos. Amén.
